Arrestada por posesión de THC y por llevar un vaporizador a la cárcel

El personal penitenciario observó un objeto extraño oculto entre su ropa

Zamira Gonzalez

COLLEGE STATION, TEXAS — Una mujer de College Station fue arrestada el sábado por la mañana por posesión de THC y, tras ser trasladada a la Cárcel del Condado de Brazos, por ocultar un vaporizador de THC en su sostén.

Zamira González, de 18 años, fue acusada de posesión intencional y consciente de tetrahidrocannabinol (THC) en una cantidad de entre 1 y 4 gramos y de llevar THC intencional y conscientemente a un centro penitenciario. González fue liberada el domingo tras pagar una fianza de $18,000.

Según un informe policial, González casi impactó un vehículo policial con su auto tras salir de la gasolinera Tigerland Express a alta velocidad. La policía informó haber visto a González intentar cruzar el camellón elevado de concreto para continuar hacia el oeste por Rock Prairie Road. Según la policía, la mitad derecha de la matrícula del auto era ilegible a menos de 15 metros de distancia.

Durante la inspección del vehículo, los agentes informaron haber encontrado un vaporizador de THC en el bolsillo trasero del asiento del conductor, una bolsa de plástico transparente con marihuana debajo del asiento del copiloto y una bebida alcohólica Twisted Tea parcialmente consumida y aún fría.

Mientras González se encontraba en proceso de registro en la Cárcel del Condado de Brazos, el informe indica que el personal penitenciario observó un objeto extraño oculto en su sostén. Los agentes determinaron que se trataba de un vaporizador de THC ilegal. El informe indica que González declaró que se asustó durante la parada de tráfico, tomó el vaporizador de un portavasos y lo escondió en su sostén a propósito.

González fue arrestada el 5 de abril, y quedó libre el día 6, tras pagar un total de $18,000 en fianzas por varios delitos.

La posesión de una sustancia controlada del grupo de penalización dos, más de un gramo pero menos de cuatro gramos, es un delito grave de tercer grado, punible con dos a diez años de prisión y una multa de hasta $10,000.