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Qué pasa en Venezuela: Papa Francisco se suma a las protestas y la presión contra Maduro

La falta de transparencia en los resultados ha provocado cuestionamiento por la comunidad internacional, al tiempo que las manifestaciones ciudadanas resultaron en arrestos y muertos


CARACAS, VENEZUELA (AP) — El pasado domingo 28 de julio de 2024 se llevaron a cabo las elecciones presidenciales en Venezuela. Luego de que las autoridades dieron por ganador a Nicolás Maduro, quien lleva más de 10 años en el poder, la oposición ha acusado un fraude, mientras que la comunidad internacional ha puesto en duda los comicios y se han desatado protestas.



Maduro, presidente de Venezuela desde 2013, cuando sucedió a Hugo Chávez, ganó las elecciones presidenciales efectuadas el domingo pasado con un 51.20% de los votos, al superar a Edmundo González, quien era el candidato de la principal coalición que cosechó un 44% del respaldo popular, según Consejo Nacional Electoral (CNE), la autoridad controlada por el gobierno nacional.


La oposición ha denunciado irregularidades en el conteo y la oposición afirma que tiene pruebas de que el anuncio es mentira y que González ganó en realidad con cerca del 70% de los votos.


Reacción de Papa Francisco por crisis en Venezuela


El Papa Francisco expresó el domingo 4 de agosto su preocupación por la “crítica situación” que vive Venezuela y pidió evitar la violencia, en medio de llamados a nivel internacional para que cesen las detenciones de manifestantes que apoyan al candidato opositor que aseguran ganó la elección presidencial.


En sus primeros comentarios sobre la crisis postelectoral en Venezuela, el Papa hizo un llamado “a todas las partes a buscar la verdad, a ejercer la moderación, a evitar cualquier tipo de violencia”.


En su plegaria del Ángelus en la Plaza de San Pedro, Francisco instó “a solucionar los conflictos a través del diálogo”, teniendo en cuenta “el verdadero bien de la población y no los intereses partidistas”.


Estados Unidos reconoce a Edmundo González como presidente

El jueves 1 de agosto, el gobierno estadounidense respaldó el triunfo de la oposición venezolana. En voz del titular del Departamento de Estado, Antony Blinken, dijo que los resultados eran claros.


“Dada la abrumadora evidencia, está claro para Estados Unidos y, lo que es más importante, para el pueblo venezolano, que González Urrutia ganó la mayoría de los votos en las elecciones presidenciales de Venezuela del 28 de julio”, declaró en un comunicado el Secretario estadounidense.


Ataques a María Corina Machado

La madrugada del viernes 2 de agosto, las oficinas de la líder opositora María Corina Machado fueron violentadas. Grupos afines a ella denunciaron que hombres armados irrumpieron en la sede del Comando Nacional de Campaña.


Reclamo de la OEA

La Organización de Estados Americanos no pudo llegar a un consenso para presionar a las autoridades venezolanas a publicar “inmediatamente” y verificar los resultados de las elecciones que dieron por ganador a Nicolás Maduro, tras varios días de críticas por falta de transparencia emitidas por organismos internacionales y líderes de la región como sus aliados Gustavo Petro y Luiz Inácio Lula da Silva.


La resolución instaba a la autoridad electoral de Venezuela “a que publique inmediatamente los resultados de la votación” y “se lleve a cabo una verificación integral de los resultados” en presencia de observadores internacionales independientes “para garantizar la transparencia, la credibilidad y la legitimidad de los resultados electorales”.


Pero tras un largo debate de más de cinco horas a puerta cerrada, los representantes de los países de la OEA no pudieron llegar a un consenso y forzaron así una votación en el Consejo Permanente de la OEA. Allí debían conseguir la mayoría absoluta de los votos, pero tampoco obtuvieron los 18 votos que necesitaban para que fuera aprobada. Les faltó uno.


“No logramos enviar juntos un mensaje contundente”, expresó el presidente del Consejo, Ronald Michael Sanders, representante de Antigua y Barbuda ante la OEA, tras haber anunciado que la resolución no había sido aprobada. “Lo que se necesitaba hoy era flexibilidad. Desafortunadamente, la flexibilidad murió en un punto. Eso fue lamentable”.


La convocatoria se dio un día después de que el secretario general de la OEA, Luis Almagro, urgiera a Nicolás Maduro a reconocer lo que dijo era su derrota en los comicios presidenciales o a convocar a una nueva elección, y en momentos en que parecía incrementarse la presión entre los países latinoamericanos.


Sanders dijo que el consenso no pudo sellarse por una oración, pero no aclaró cuál fue.


Brasil y Colombia, cuyos líderes habían exigido transparencia a la autoridad electoral en los últimos días, se abstuvieron. México ya había anticipado que no estaría presente.


Un total de 17 miembros del Consejo Permanente de la OEA votaron a favor, 11 se abstuvieron y cinco estuvieron ausentes, entre ellos Trinidad y Tobago y la propia Venezuela, además de México. No hubo votos en contra.


También se abstuvieron Bolivia y Honduras, entre otros. A favor de la resolución votaron Argentina, Canadá, Chile, Costa Rica, El Salvador, Panamá, Perú, República Dominicana y Estados Unidos, entre otros.


La presión extranjera fue incrementándose luego de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamara el lunes oficialmente presidente a Maduro, en su segunda reelección para un tercer mandato de seis años, después de difundir resultados que daban al mandatario la victoria con 51% de los votos por 44% del candidato opositor Edmundo González.


Miles de opositores han salido a las calles de Venezuela a protestar contra este resultado.

La oposición venezolana, liderada por María Corina Machado y González, sostiene que ha ganado los comicios por un margen sustancial y reclama a las autoridades la publicación de las actas electorales.


Gobiernos que representan un amplio espectro político, desde la izquierda a la derecha, se han sumado a los reclamos, incluyendo a Argentina, Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Panamá, Perú, República Dominicana y la Unión Europea, entre otros.


Protestas

A causa, en buena medida por la falta de transparencia en los resultados, desde el lunes posterior a las elecciones se empezaron a registrar protestas ciudadanas en Venezuela.


Las manifestaciones multitudinarias de opositores dicen que su candidato, Edmundo González, derrotó al actual presidente y candidato oficialista.


Machado se concentró en la mañana ante miles de seguidores en el este de Caracas y exigió al CNE que transparentara las actas de votación de las elecciones del domingo para que se pueda comprobar si ganó Maduro o si, como defiende la oposición, González tuvo la mayoría de votos.


Maduro aseguró además que mantendrá la disposición de movilizar a policías y militares en las protestas que se levantaron en la capital y en varios puntos más del país desde el lunes contra los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral.


Las fuerzas de seguridad han detenido al menos a 177 personas en manifestaciones pacíficas a favor del candidato de oposición. Entre los detenidos, incluso, figura Freddy Superlano, otro líder opositor, que fue obligado a bajar de su vehículo por hombres vestidos con ropa negra.


Grupos de derechos humanos denunciaron que al menos 11 personas han muerto durante las protestas celebradas después de que se declarara ganador a Maduro.


Mientras se intensificaban las protestas a favor de González, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, apareció ante las cámaras afirmando que Maduro era víctima de un intento de golpe de Estado lanzado por grupos extremistas.


Padrino López dijo que Maduro, como comandante en jefe de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, estaba tomando medidas con el apoyo del pueblo venezolano para detener el derrocamiento de su gobierno.


Altos cargos del régimen también pidieron la detención de la cúpula de la oposición. El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, uno de los principales aliados de Maduro, dijo ante el Congreso venezolano que la fiscal general del país debería detener tanto a González como a Machado.


Ante la ola detenciones y muertes, Machado acusó el miércoles al gobierno venezolano de emprender una “escalada cruel y represiva”. “Esta es la respuesta criminal de Maduro al pueblo venezolano que salió a la calle”, dijo la líder opositora en un mensaje que publicó en su cuenta de X al advertir que “esos crímenes no quedarán impunes”.


Quién es Maduro

Maduro pasó de ser un personaje secundario cuando Chávez estaba al mando de Venezuela a gobernar el país, en sus propias palabras, con mano de hierro.


Tras 11 años en el poder, en los que ha combatido insurrecciones de sus adversarios y protestas de la población, así como navegar entre sanciones comerciales, el aislamiento internacional, sublevaciones en las filas del oficialismo y el deterioro de la economía nacional, Maduro llegó a estos comicios ante un bloque opositor que alimentó entre los suyos anhelos de cambio y esperanzas de un futuro mejor para Venezuela.


Por primera vez en su carrera política, el exsindicalista del Metro, de 61 años de edad, se midió en las urnas sin el respaldo de popularidad que heredó de Chávez (1999-2013) tras su muerte y que lo impulsó en la elección de abril 2013. Tampoco con la ventaja que tuvo en los cuestionados comicios del 2018, cuando compitió prácticamente solo, luego de que la coalición opositora se negara a participar alegando la falta de garantías.

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